Add parallel Print Page Options

29 Una vez más, Abraham dijo:

—¿Y qué tal si sólo encuentras cuarenta?

Dios le aseguró:

—Por esos cuarenta, no destruiré la ciudad.

30 Pero Abraham insistió:

—Dios mío, no te enojes conmigo si sigo hablando; pero, ¿qué pasará si no hay más que treinta personas buenas?

Y Dios le dijo:

—Si encuentro esas treinta personas, no destruiré la ciudad.

31 Abraham volvió a insistir:

—Dios mío, realmente soy muy atrevido, pero ¿si sólo se encuentran veinte?

Dios respondió:

—Hasta por esos veinte, no destruiré la ciudad.

Read full chapter